Caida Celestial

El subsuelo, un lugar temido por los ángeles, guardianes de Dios, debido a su esencia oscura y a los rumores que corren sobre que es un lugar gobernado por el mal. Durante muchos años hubo un solo habitante en este lugar, Cassadie, el cual, a pesar de las fuertes alucinaciones y torturas a las que le sometía el dios de mal pudo mantener una pizca de bondad y del bien en su corazón para no caer del todo al infierno y perderse completamente a sí mismo. Se puede observar el fruto de las acciones del dios del mal en el aspecto del pequeño ángel caído y también en su mentalidad y forma de comportarse.

-Traicionaste a tu creador…. -Sonaban constantemente voces en su cabeza.- Jamás volverás a obtener el amor de tu Dios.

En ese espacio solo se podían escuchar los gritos de desesperación de Cassadie. Entre el constante ruido se comienzan a escuchar unos ligeros pasos, estos pertenecían a Seraphina, otro pequeño ángel que Dios había expulsado. Al verlo las alucinaciones y las voces cesaron y su mirada se clavó en la silueta que se estaba acercando poco a poco hacia él.

-¿Otro ángel caído?- Pensó Cassadie -Es mi billete para salir de aquí.- Una ligera sonrisa se formó en sus labios.

-¿Tu Dios te ha abandonado aquí? -Preguntó Cassadie acercándose al nuevo habitante del subsuelo.

-¿Qué es este lugar? -La voz de Seraphina sonaba temblorosa al formular esa pregunta.

-Tu nuevo hogar.- Respondió secamente.

Tras escuchar esa respuesta se podía observar como un gran miedo y una gran ansiedad invadía el cuerpo del nuevo ángel caído. Se podía ver como Cassadie disfrutaba de ver las reacciones del recién llegado, hacía mucho tiempo que no interactuaba con alguien que no fueran sus propias voces.

-¿Quieres regresar al cielo verdad?- Cassadie quería aprovechar esta nueva oportunidad para salir de ese lugar, ya que a pesar, de haber intentado escapar de allí múltiples veces, siempre fallaba.- Por nuestra cuenta jamás podremos volver al cielo, pero si trabajamos juntos seremos capaces.- Agarró por los hombros ligeramente fuerte al Seraphina y mientras hablaba podía notarse la desesperación que tenía por salir de allí.

A pesar de que Cassadie no le daba nada de confianza decide cooperar con él, pues quedarse allí era una decisión mucho peor.

-Trabajemos juntos para regresar.- Afirmó Seraphina.